Green Friday: un viernes negro sostenible es posible

Green Friday

Empresa

El Green Friday es una iniciativa que contribuye a situar al Black Friday en un contexto que genere mayor armonía entre la empresa y su entorno.

En efecto, el Black Friday tiene importantes funciones para el comercio, desde las puramente comerciales a otras como las financieras o las logísticas, pero tampoco ha de perderse nunca de vista la oportunidad que supone para redoblar la apuesta por la sostenibilidad.

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¿Qué es el Green Friday?

Es un conjunto de iniciativas internacionales promovida por diversas organizaciones. Entre ellas figuran la Comisión Europea, Ecodes, WWF, Ecoserveis o El Hervidero de Ideas. Busca convertir el Black Friday en una jornada sostenible y que sirva de referencia para el consumo responsable. Ello se articula a través de diferentes tipos de acciones:

Eco

Las razones para apartarse del consumismo

El consumismo es una especie de búmeran para las empresas. Los clientes pueden lanzarse a comprar productos sin una adecuada reflexión y, pasadas unas pocas jornadas, pueden llegar a la conclusión de que han hecho una mala compra y de que el comercio ha orientado mal sus decisiones.

Obviamente, eso es lo contrario de lo que se quiere conseguir. Sí, se busca un incremento de ventas con el Black Friday, pero también hay que potenciar la fidelización. Hay que pensar en el corto plazo, pero también hay que construir un futuro.

La confianza es, probablemente, el mayor intangible que puede tener una empresa. Fomentar el consumismo es una forma de lesionarla. A partir de ahí es difícil hacer creer a los clientes que están en el centro de todas las preocupaciones de la empresa. Y, con ello, se pierde credibilidad frente a inversores, trabajadores y otras partes interesadas.

Productos sostenibles

Sin embargo, ello no significa que la sostenibilidad esté reñida con las herramientas del marketing mix. De hecho, el Green Friday es una buena oportunidad para:

Cómo incorporar el Green Friday a nuestro comercio

Lo primero es que, en este caso, la unión hace la fuerza. Es importante compartir nuestras iniciativas sostenibles del Black Friday con otras empresas y organizaciones. No olvidemos que el Green Friday plantea un desafío comunicativo.

Entre todos los participantes, es más sencillo concebir y difundir mensajes que lleguen mejor. Además, se contribuye a crear una marca que sirva de señal a los consumidores para saber qué empresas están involucradas.

En segundo lugar, los datos son doblemente importantes. Hemos de descifrar qué necesitan nuestros consumidores, pero también qué es lo que no necesitan. De nada sirve ofrecer productos ecofriendly a quienes no les van a dar una utilidad concreta.

Distribución sostenible

Otro aspecto importante es la capacidad de involucrar a los proveedores en nuestro Green Friday. Deben sentir que su producto sostenible está en buenas manos y que, pasada esta jornada, seremos capaces de fidelizar a los clientes. En ese sentido, el feedback de estos últimos es más necesario que nunca.

El Green Friday es un gran escaparate de buenas prácticas. Demuestra una empresa consciente de las necesidades de los consumidores, con buena integración dentro de la cadena de proveedores y clientes, con capacidad para mejorar la sociedad en la que vivimos y que promueve la preservación ambiental.

Imágenes | Margot RICHARD, Anaya Katlego,Noah Buscher,Marten Bjork  en Unsplash

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