Los falsos autónomos se han convertido en uno de los colectivos que más está dando de hablar en los últimos años. La Inspección de Trabajo ha puesto su punto de mira en este conjunto particular de profesionales, al considerar que desvirtúa por completo la esencia del trabajo por cuenta ajena.
Pero ¿sabes qué son los falsos autónomos y cómo saber identificarlos en una empresa? Te lo explicamos. [hde_related]
Qué es un falso autónomo
Un falso autónomo es aquel trabajador que está dado de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), pero que realiza sus tareas para una empresa como si fuese un asalariado. Dicho de otro modo, trabajan para una única compañía y realizan las mismas funciones que un empleado contratado, pero no tienen sus mismas condiciones ni derechos y, además, deben pagarse sus propias cotizaciones a la Seguridad Social.
Se los llama así porque, a diferencia del resto de freelancers, no tienen autonomía ni libertad dentro de su actividad. Están en una situación en la que dependen de las directrices de un empresario.
Los falsos autónomos no son exclusivos de ningún sector ni actividad ni tienen un rango de edad limitado. Todas las empresas pueden tener falsos autónomos contratados, incluso sin ellos saber que se encuentran en una situación ilegal.
Qué regulación afecta a los falsos autónomos
Los falsos autónomos son ilegales, en la medida en que realizan las tributaciones y cotizaciones correctas. Existe una figura similar, la del Trabajador Autónomo Económicamente Dependiente (más conocido por sus siglas Trade), regulado en el artículo 11 y siguientes de la Ley 20/2007, de 11 de julio, del Estatuto del trabajo autónomo.
Los Trade son aquellos trabajadores por cuenta propia que tienen una consideración especial dentro del colectivo autónomo. Dependen económicamente de un único cliente, del que perciben, como mínimo, el 75% del total de sus ingresos, y no pueden tener trabajadores contratados. Pueden asimilarse a un trabajador por cuenta ajena, ya que cuentan con una serie de derechos similares.
Ventajas de los Trade
Ser trabajador económicamente dependiente tiene un nivel de protección superior al de un autónomo normal, siempre que esté reconocido como tal. Esto se traduce en las siguientes condiciones:
- Tienen derecho a vacaciones, ya que cuentan con 18 días hábiles por año.
- Pueden acceder al permiso por maternidad y paternidad con unos requisitos especiales. En concreto, no se les aplica el período mínimo de cotización establecido por Ley para el resto de trabajadores (de 180 días).
- Tienen derecho a indemnización si el cliente incumple de manera injustificada alguna de las condiciones contractuales.
- Pueden disfrutar de la prestación por desempleo, si el trabajador tiene cubierto el periodo mínimo de cotización en la cobertura por cese de actividad.
Cómo saber si eres un falso autónomo
Saber diferenciar entre si nuestra situación es legal o no es, en ocasiones, difícil. La existencia de una figura perfectamente legal como los Trade puede generar confusión, si se compara con el caso de los falsos autónomos.
Sin embargo, un Trade dista mucho de ser un falso autónomo. Existen diferencias entre ambos que, legalmente, les hacen ser bastante diferentes. La asociación de autónomos Uatae ha establecido tres factores para distinguirlos:
- Un autónomo Trade posee en propiedad todos los elementos necesarios para ejercer su actividad, como un ordenador, el teléfono móvil, etc. Si la empresa provee todas las herramientas, puede que te encuentres en situación de falso autónomo.
- Los autónomos Trade tienen libertad para elegir y determinar sus horarios, su lugar de trabajo y hasta sus días de vacaciones. Los falsos autónomos dependen de las directrices de la organización, de manera que se encuentran en una situación de dependencia.
- Por último, como Trade puedes elegir cuánto quieres ganar en función de las tarifas que establezcas por tu trabajo. Si no puedes negociar tu reparto en los beneficios que generas y dependes del dinero que te ofrezca la empresa, puede que seas un falso autónomo.
Además, desde el punto de vista legal, un Trade está considerado como tal por la empresa que solicita los servicios y, por tanto, tiene una consideración especial en el RETA. Los falsos autónomos están dados de alta como autónomos normales y, por tanto, ni siquiera pueden beneficiarse de los derechos de un Trade.
En los últimos años, la Inspección ha identificado muchas empresas con falsos autónomos contratados, e impuesto las sanciones correspondientes. Una práctica demasiado habitual en algunos sectores pero, como hemos visto, también ilegal.
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