La crisis económica derivada de la COVID-19 está poniendo contra las cuerdas a millones de personas y está agrandando la brecha social y digital. Para remediarlo, están apareciendo iniciativas como la Tarifa Social de Orange. [hde_related]
A nadie se le escapa que la economía española está siendo una de las más castigadas en Europa por la crisis sanitaria. Se han perdido cientos de miles de puestos de trabajo en sectores clave como el turismo, la hostelería, la restauración o el transporte. Y la situación de incertidumbre se mantiene para muchísimas personas que permanecen en ERTE.
En consecuencia, las condiciones básicas de vida de muchos españoles han empeorado desde marzo, cuando se desató la pandemia. La ONG Oxfam Intermón advirtió recientemente de que, si no se toman medidas para blindar la sanidad o la protección social, se podrían alcanzar en España los 10,9 millones de ciudadanos en situación de pobreza, un millón más que en la actualidad.
Además, este empobrecimiento no es exclusivo de nuestro país. El Banco Mundial prevé que la pobreza extrema en todo el planeta aumente este año por primera vez en dos décadas. El retroceso es también resultado de la crisis derivada de la COVID-19. Esta institución calcula que en 2020 entre 88 millones y 115 millones de personas entrarán en un estado de pobreza extrema, es decir, vivirán con menos de 1,9 dólares al día.
Siguiendo el ejemplo del bono social eléctrico
Toda ayuda es poca ante la magnitud del colapso económico y la desigualdad que deja la COVID-19. Una respuesta social muy visible han sido los bancos de alimentos. Además, para aliviar a las familias afectadas por el desempleo y la incertidumbre económica que está dejando la pandemia, las instituciones y las empresas se están coordinando para echar una mano y ofrecer ayudas de todo tipo. Es el caso del bono social eléctrico, que intenta mantener en muchos hogares un bien tan básico como es la energía.
Así, desde el pasado 1 de octubre, se ha agilizado la tramitación de esta ayuda, que supone un descuento del 25% en la factura de la electricidad. Ahora los solicitantes ya no tienen que esperar a contar con la última declaración de IRPF para acreditar sus ingresos. En su lugar, pueden ir a cualquier oficina de la compañía que les da el servicio y acceder a la ayuda con solo firmar una declaración responsable y una justificación de que están en el paro o de cese de actividad, en el caso de ser autónomos.
Paquete convergente para los más necesitados
Pero no solo en el sector eléctrico se están ofreciendo estos bonos sociales a hogares y familias en situación de vulnerabilidad. En el mundo de la tecnología y las telecomunicaciones, las compañías también están redoblando esfuerzos para aliviar a los más necesitados. Un ejemplo es el de la Tarifa Social Orange, que nace, además, con el fin de mantenerse en el tiempo.
Con esta iniciativa, Orange tiene el propósito de reducir la brecha digital para los colectivos más vulnerables y ayudar a las familias a atender las necesidades escolares y de conectividad de sus hijos, sobre todo durante un curso escolar que será parcialmente online.
Luz Usamentiaga, responsable de Relaciones Institucionales y RSC de Orange, reconoce que el confinamiento dejó en la compañía muchos aprendizajes, y uno de ellos fue “entender de verdad en qué consiste la brecha digital y cómo contribuir a reducirla o paliar en parte sus efectos”.
“En esta situación nos dimos cuenta de que teníamos que ir un paso adelante. Y era sacar una tarifa que va a formar parte de nuestro tarifario habitual y que va a permanecer en el tiempo”, explica Usamentiaga. La responsable de RSC recalca que el principal objetivo es ayudar “a esas familias que tienen una situación de vulnerabilidad económica y que, sin embargo, no pueden dejar de ayudar a sus hijos con las tareas escolares y garantizarles el seguimiento del curso”.
La Tarifa Social de Orange es un paquete convergente de servicios que incluye acceso a internet, telefonía fija y telefonía móvil. En concreto, por solo 14,95 € al mes, los clientes que contraten esta tarifa tienen acceso a fibra simétrica a 100 Mbps, línea fija con llamadas ilimitadas a fijos nacionales, y una línea móvil con llamadas ilimitadas a fijos y móviles nacionales, además de un bono de 3 GB de datos para navegar a máxima velocidad móvil. Todo ello, además, durante un periodo de 12 meses renovables.
La primera convocatoria para optar a la Tarifa Social de Orange fue lanzada en octubre, y a principios de 2021 tendrá lugar la siguiente. Orange se ha propuesto hacer dos convocatorias de esta ayuda al año y cada campaña tendrá un mes de duración. Para consultar cuándo será la próxima convocatoria y otros detalles de esta ayuda, está disponible esta página.
Los aspirantes a recibir la Tarifa Social de Orange tendrán que justificar que son beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital o de la Renta Mínima de Inserción. Además, deberán presentar un certificado de empadronamiento porque la instalación del teléfono fijo se realizará a nombre del beneficiario de la ayuda en el domicilio en el que está empadronado.
Acceso gratuito gracias a los Gigas Solidarios
Asimismo, Orange cuenta desde 2017 con otra iniciativa para favorecer la inclusión digital en España. Se trata de Gigas Solidarios. En este caso, son las ONG colaboradoras las que identifican para Orange a las familias con necesidades.
Y la ayuda proviene de los gigas sobrantes de los usuarios de Orange que participan en esta acción, que se pueden dar de alta como cliente solidario a través de la aplicación Mi Orange. Así, por cada 500 gigas acumulados, Orange ayuda a una familia durante todo un año.
El objetivo vuelve a ser el facilitar el acceso gratuito a internet a familias con hijos en edad escolar y que se encuentren en situación de vulnerabilidad y exclusión digital. En estos momentos más de 5.400 familias con hijos en el colegio se han beneficiado de esta bolsa solidaria.
Imágenes | Orange España, iStock.com/Plateresca, Everton Vila/Unsplash