Javier Rodríguez Zapatero, exdirector general de Google en España y presidente de ISDI, explica en un libro la hoja de ruta para que este país se convierta en una potencia en tiempos de digitalización acelerada.
En ‘Por una España Digital’, Rodríguez Zapatero, que ahora dirige la escuela de negocios ISDI (Instituto Superior para el Desarrollo de Internet), cree que nos la jugamos sobre todo en el ámbito de la educación. Por eso pide repensar el modelo de arriba a abajo, desde la universidad a la primaria. Sus críticas han levantado ampollas en algunos colectivos, pero él cree que falta en España un debate serio sobre cómo educamos y sobre el aprendizaje en el siglo XXI.
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¿Qué nubarrones ve en la economía y la sociedad española en estos momentos? Y no pregunto solo por los problemas a los que nos ha abocado la crisis de la COVID-19.
Los problemas estructurales, desgraciadamente, han sido potenciados por la COVID-19. El gran nubarrón es que tenemos un sistema productivo débil. Y que no está subiéndose al carro de la revolución digital en la que estamos, y que es la que está generando valor. Tenemos que cambiar nuestro modelo productivo si queremos generar riqueza para poder repartir en el futuro.
Efectivamente, los economistas suelen decir que el gran mal de la economía de este país está en la baja productividad y en el bajo valor añadido de las actividades a las que nos dedicamos en España. Lo que da lugar a una pobre generación de riqueza.
Cuando no se genera valor y la productividad solo se basa en salarios bajos, pues hay un problema técnico. España es un país que no ha sido capaz de mejorar consistentemente su productividad. O nos damos cuenta de esto o seguimos siendo, como digo en el libro, el bar de copas de Europa.
[hde_quote author=»Javier Rodríguez Zapatero,» position=»presidente de ISDI»] La reinvención basada en la digitalización va mucho más allá de la tecnología [/hde_quote]
En su libro propone una reinvención del país y de sus empresas, que pasa por digitalizarlas. Y no parece que se refiera solo a dotarse de tecnología, hacer comercio electrónico o estar en las redes sociales. ¿Qué es para usted esta reinvención basada en la digitalización?
La reinvención basada en la digitalización va mucho más allá de la tecnología. La tecnología es el denominador común para lograr eficiencia. Pero esta época digital supone un cambio cultural, e incluso una readaptación de los valores. Cambia la manera en que nos gestionamos nosotros a nivel personal, a nuestras compañías y a la sociedad.
La tecnología hace que tengamos lo que queremos en poco tiempo o que socialicemos en poco tiempo. Hay un crecimiento exponencial de la velocidad de cambio. Tenemos que adaptarnos al cambio más rápidamente. Y esto es la gran revolución.
Parece que la inyección masiva de fondos para la reconstrucción europea, y que sobre todo se dirigirá a financiar proyectos de digitalización y sostenibilidad, es una oportunidad de oro para dar este salto adelante. ¿Cree que seremos capaces de aprovechar este viento de cola?
Europa es consciente de que necesitamos un cambio de modelo productivo que pasa por la sostenibilidad, por la economía de red y por la digitalización. Estamos ahora en el ojo del huracán. Nos acabamos de enterar de por dónde va a ir la aplicación de fondos y se está buscando colaboración público-privada, pero nos han dado hasta el 10 enero para poner en marcha unos planes que, si lo hacemos bien, cambiarán el futuro del país. Creo que hay que hacer las cosas con más tranquilidad. En cualquier caso, creo que es ahora o nunca. Es una oportunidad de desarrollo única para España. No hemos tenido una como esta nunca.
[hde_quote author=»Javier Rodríguez Zapatero,» position=»presidente de ISDI»] Tenemos que adaptarnos al cambio más rápidamente. Y esto es la gran revolución [/hde_quote]
¿Cuáles son los mayores lastres que impiden en España su reinvención y que usted define en el libro como “grandes dinosaurios que arrastramos desde hace generaciones”?
Tenemos piedras bastante pesadas en la mochila. La administración es muy pesada para lo que es una sociedad digital. Yo nos comparo en el libro con países mucho más ligeros, como Estonia. Tenemos dinosaurios como las universidades, que viven todavía con modelos de conocimiento basados en un profesorado que no se sabe ni qué investiga ni para qué lo hace.
Tenemos una educación que no nos vale para este siglo. Que no haya habido consenso en la nueva ley de educación [la llamada ‘ley Celaá’] es un fracaso enorme. Además, tenemos unas pequeñas empresas que no son capaces de dar el salto a la digitalización y hacerse más grandes, y aprovechar la escalabilidad que les ofrece la tecnología.
En ‘Por una España digital’ insiste en pedir de una vez por todas un pacto por la educación y advierte de que no nos podemos permitir titubeos en este campo porque la velocidad a la que se dan los cambios en estos momentos es tan grande que el futuro de los países se juega, sobre todo, en el campo del aprendizaje. Pero parece que nunca nos vamos a poner de acuerdo.
Hoy la educación se ha convertido en un arma arrojadiza ideológica. Se fomenta el debate en aquello que provoca el desencuentro, pero no hay una energía positiva para pensar en la educación del futuro y para tirar para adelante. En el libro apunto ideas para mejorar. A algunos no les han gustado nada, pero creo que podrían servir.
Necesitamos a los profesores más preparados, más avezados y con más vocación del mundo. Hay que pagarles mejor, pero también exigirles más. La educación primaria se merece a unos profesores que sean una especie de élite social. Como ocurre en países como Finlandia, Singapur, Canadá o Australia.
[hde_quote author=»Javier Rodríguez Zapatero,» position=»presidente de ISDI»] La educación primaria se merece a unos profesores que sean una especie de élite social. Como ocurre en países como Finlandia o Canadá [/hde_quote]
La universidad hay que acercarla a la sociedad. Y no puede ser tan rígida. Y la Formación Profesional (FP) habría que cambiarla para acercarla a la demanda de empleo que hay en estos momentos. Hay ahora muchos empleos que no se cubren en España porque la gente no está preparada.
Si todo esto se explica bien a la sociedad, yo creo que podríamos tener un debate que no esté centrado en si se da religión o no. Y ahí vosotros, los periodistas, tenéis la obligación de orientar el debate en la dirección correcta.
También aborda en su libro el hecho de que somos un país escasamente emprendedor, donde se penaliza demasiado el fracaso y donde hay más estudiantes de bachillerato que quieren ser funcionarios que los que quieren montar su propio negocio. ¿Cómo se le da la vuelta a la tortilla?
Hay que facilitar las cosas a la gente que empieza, que se aventura a montar un negocio. En el libro pido bajar las barreras legislativas y facilitar la entrada en el emprendimiento. Y luego está la parte cultural, que es más difícil. El español tiende a ser envidioso y a alegrarse del fracaso ajeno.
[hde_quote author=»Javier Rodríguez Zapatero,» position=»presidente de ISDI»] No tenemos referentes empresariales. Pensamos en que si alguien ha tenido éxito es porque algo malo ha hecho [/hde_quote]
Y además no tenemos referentes empresariales. No ensalzamos a un Amancio Ortega, de Inditex, o a un Juan Roig, de Mercadona. Pensamos en que si alguien ha tenido éxito es porque algo malo ha hecho. Hay muchos empresarios que piensan que hacer empresa es crear valor para la sociedad.
Hemos hablado de los déficits de este país, pero, ¿qué cosas buenas exhibe la economía y la sociedad española y que favorecerían este cambio a lo digital?
Doy muchos mandobles en el libro, pero también soy muy positivo. En España tenemos una creatividad, una flexibilidad y una capacidad para solucionar problemas en poco tiempo que, además, son características fundamentales en la era digital.
[hde_quote author=»Javier Rodríguez Zapatero,» position=»presidente de ISDI»] En España tenemos una creatividad, una flexibilidad y una capacidad para solucionar problemas que son fundamentales en la era digital [/hde_quote]
En esta nueva época los modelos industriales alemanes funcionan menos que los modelos que nosotros explicamos en ISDI, que enseña a la gente a moverse rápido, a cambiar de idea y a probarla rápidamente en el mercado. Si fuéramos capaces de cambiar la mentalidad sobre el aprendizaje, nuestro ADN nos puede hacer triunfar en esta nueva era digital.
¿Cuáles son los modelos a seguir en este camino hacia la digitalización? Algunos analistas elogian los casos de Corea del Sur o de Israel, estados relativamente pobres décadas atrás, como España, y que han logrado una reinvención exitosa.
El caso de Corea es espectacular. Se trata de un país que tenía el mismo PIB que Perú en los años sesenta. Y lo que hizo fue tecnificar el país, pero centrándose inicialmente en los sectores productivos en los que era fuerte, como el textil. Luego esa tecnología se aplicó a otros sectores y hoy es una potencia.
Algo parecido habría que hacer aquí. En España no debemos ir al café para todos, sino ver en qué sectores somos más fuertes y hacer ahí la inversión tecnológica y en talento. Hablo de crear una industria turística que sea referente en todo el mundo. También hablo de la automoción. Deberíamos tener en España un hub de desarrollo tecnológico. En general, debemos ser inteligentes y selectivos, y dedicar todo el esfuerzo a aquellos sectores en los que somos fuertes.
[hde_quote author=»Javier Rodríguez Zapatero,» position=»presidente de ISDI»] Debemos ser inteligentes y selectivos, y dedicar todo el esfuerzo a aquellos sectores en los que somos fuertes [/hde_quote]
Usted ha sido alto directivo durante muchos años de empresas como Yahoo! o Google, tecnológicas que están en el centro de la ola de digitalización que vivimos. ¿Qué enseñanzas pueden aprender de estas grandes compañías nuestras empresas nacionales?
Yo de estas compañías, sobre todo de Google, lo que he aprendido es que hay que luchar constantemente contra tu tamaño. Tienes que querer en todo momento sentirte joven, ligero y ágil. Y eso es algo muy difícil a medida que te haces grande. Compañías como Google, Microsoft o Amazon han crecido más del 20% cada año durante el último lustro, a pesar de su tamaño y de que todo el mundo pensaba que en algún momento tendrían que parar.
[hde_quote author=»Javier Rodríguez Zapatero,» position=»presidente de ISDI»] Para que una startup española llegue a un mercado como el europeo debe pasar una media de 167 piezas de regulación. Mientras que en Estados Unidos, unas 35 [/hde_quote]
El suelo que pisamos cada vez es más inestable y estas compañías lo tienen asumido en su ADN. Aquí en España y en Europa buscamos en la regulación el factor tranquilizador para hacer que el suelo que pisamos sea firme. Y ese suelo ya no va a ser firme nunca más. Para que una startup española llegue a un mercado como el europeo debe pasar una media de 167 piezas de regulación. Mientras que en Estados Unidos, unas 35. Eso da una pista.
Efectivamente, en el libro a los políticos en España y en Europa les pide más rapidez para adaptarse y no ser tan conservadores a la hora de regular los nuevos escenarios económicos. Si no he entendido mal, usted considera que, si Europa no se pone las pilas, se quedará irremediablemente atrás y tendrá que dedicarse a recoger las migajas que dejen EE. UU., China y las grandes tecnológicas.
Somos una región con mucho potencial y talento, pero el político tiene ser consciente de que tiene que regular un entorno cambiante. Y, además, no tiene cinco años para reaccionar, sino que tiene que reaccionar antes de que las cosas pasen. La clase política tiene que aprender del entorno que está regulando. Y luego hay que ponerse manos a la obra. Si no, nos convertiremos en provincias o colonias de las grandes superpotencias.
[hde_quote author=»Javier Rodríguez Zapatero,» position=»presidente de ISDI»] Los políticos tienen que reaccionar antes de que las cosas pasen. Si no, nos convertiremos en provincias o colonias de las grandes superpotencias [/hde_quote]
Y una última cuestión: ¿ve voluntad en el Gobierno de apostar claramente por la digitalización y la innovación que usted defiende?
Sí. El Plan España Digital 2025 está ahí y tiene bastante sentido. Aunque el secreto está en la ejecución, en que el dinero esté bien canalizado y en que haya buena colaboración público-privada. Pero el diagnóstico es bueno.
Imágenes | Editorial Deusto (Planeta de Libros)