Hacia una transformación real del liderazgo femenino

Empresa

¿Cómo afecta la incorporación de la mujer a puestos de dirección? ¿Es el liderazgo femenino clave para conseguir mejores resultados económicos?

Estas y otras preguntas son el punto de partida de la la Barcelona Woman Acceleration Week (BWAW), un evento que pone el foco en acelerar y dinamizar la igualdad de oportunidades de la mujer en el sector industrial que organizan el Consorci de la Zona Franca de Barcelona (CZFB) y la Fundación Incyde.

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Los entornos empresariales exploran y exigen nuevos modelos de trabajar y liderar.  Por una parte, las organizaciones más consolidadas necesitan romper el techo de cristal y contar con más mujeres en sus equipos directivos. Por otra, el ecosistema startup demanda mayor presencia femenina. ¿Cuáles son los retos a conseguir? ¿Qué factores son clave para alcanzar la igualdad? Hablamos sobre estos temas con Natalia Vázquez Poza, Directora de Proyectos FEDER de la Fundación INCYDE.

Es la primera edición de la BWAW, pero la intención es que se convierta en un evento anual. ¿Cómo surge la idea?

La idea surgió de la colaboración que desde hace ya mucho tiempo tenemos la Fundación INCYDE con el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona en numerosos proyectos. En octubre llevamos a cabo un foro orientado a fomentar el emprendimiento para las personas con discapacidad. Fue entonces cuando surgió la necesidad de promover un evento pionero que facilitase la igualdad de oportunidades para la mujer y nos pusimos a trabajar en BWAW. Han sido muchos meses de esfuerzo para  abordar todas las temáticas  y contar con ponentes de gran prestigio. El fruto son estas jornadas en las que podemos compartir conocimientos sobre diferentes ámbitos de la sociedad y la economía con el fin de ayudar a construir una nueva sociedad para las generaciones futuras de hombres y mujeres. 

El evento se define como “paritario”. ¿Cuál es el papel de los hombres en el evento?

Incorporar a los hombres es clave para conseguir la plena igualdad de género. La sociedad está constituida por hombres y mujeres, por lo que, si no hay una plena implicación de ambas partes, los objetivos no se conseguirán. Sin la implicación activa y consciente del género masculino, no se alcanzarán beneficios para todos, que ayudarán a tener una ciudadanía más moderna y avanzada. 

Es necesario promover medidas de acción para alcanzar la verdadera paridad en todos los espacios y contextos en donde alguno de ellos esté infrarrepresentado. En mi opinión, el papel de un hombre en el diseño y aplicación de las políticas de igualdad es muy importante.

Vemos perfiles de todo tipo entre los speakers, desde influencers hasta el ex presidente de Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. ¿Por qué es importante contar con tantas voces y perspectivas?

La diversidad es fundamental para avanzar porque promueve un clima heterogéneo que permite crecer y conseguir las metas más rápidamente. Si contamos únicamente con una perspectiva, nos faltará información, opinión y  puntos de vista de la generalidad.   

El 34% de los puestos directivos de las empresas españolas está ocupado por mujeres. Este dato supone una mejora de cuatro puntos respecto al año 2019. ¿Cuáles son los factores más determinantes para conseguir que este porcentaje siga aumentando?

Estos datos son muy halagüeños y demuestran que el trabajo que se está realizando está consiguiendo resultados. Aumentar en un solo año un 4% (año marcado por la pandemia que ha incidido en todos los ámbitos sociales y económicos) es un gran paso.

Sin embargo, efectivamente, queda aún camino por recorrer, y el techo de cristal en los puestos directivos existe, lamentablemente. Los estudios demuestran que las empresas con equipos directivos en los que existe paridad de género son más innovadoras y registran mejores resultados financieros. Además, existe una correlación entre las empresas con un número significativo de mujeres en sus equipos directivos y sus resultados económicos. 

[hde_quote author=»Natalia Vázquez» position=»Directora de Proyectos FEDER de la Fundación INCYDE»] Los estudios demuestran que las empresas con equipos directivos en los que existe paridad de género son más innovadoras y registran mejores resultados financieros [/hde_quote]

Solo la acción combinada de todos los agentes implicados conseguirá un incremento relevante de la presencia de la mujer en la dirección de las empresas. 

Para conseguir que crezca la representación femenina en los puestos directivos es fundamental promover una mayor flexibilidad en las formas de trabajo y conseguir organizaciones que valoren y primen los méritos principalmente. Los puestos directivos deben ser ocupados por personas con conocimiento y preparación, implicadas y válidas para ocupar esos cargos, independientemente de si se trata de un hombre o una mujer. La verdadera paridad es el valorar a la persona  independientemente del sexo.

¿Qué impacto tiene (o tendrá) el liderazgo femenino en las organizaciones? ¿Qué diferencias existen en la gobernanza entre hombres y mujeres?

Las empresas y las organizaciones deben ser diversas porque deben reflejar lo que demandan los clientes. Las mujeres cada vez tenemos más relevancia en las decisiones de compra, consumo e inversión, y este papel irá aumentando en los próximos años. Por eso, contar con equipos directivos equilibrados supone mejorar las estrategias de venta y, por lo tanto, la facturación y los resultados.

Es necesario incorporar a líderes que le den un sentido de dirección al equipo de trabajo, y genere e implemente decisiones trascendentes y que motiven a sus seguidores, independientemente de si son hombres o mujeres. 

Si hablamos de emprendimiento, parece que aún queda más camino que recorrer hacia la igualdad. Según la plataforma Startupxplore, el 85% y el 90% de los impulsores de las startups son hombres de entre 30 y 35 años. ¿Qué explica la baja tasa de emprendimiento femenino?

Efectivamente la tasa de startups puestas en marcha por mujeres sigue siendo reducida y es necesario promover todas las medidas necesarias para incrementar su presencia. Uno de los motivos, en mi opinión, es que en estos momentos las mujeres que ponen en marcha una startup rondan los 35 años, por lo tanto, son aquellas que se han formado en los colegios hace 25 o 30 años. En esa época aún no se estaba impulsando el sector STEM en el ámbito femenino y los referentes tecnológicos femeninos que teníamos eran pocos. No se inculcaba el estudio de carreras tecnológicas a las niñas, y así es difícil tener interés por conocerlo.

Sin embargo, me parece importante señalar que en el ámbito global del emprendimiento, y según el último informe GEM 2019-2020, el porcentaje de la población emprendedora en fase inicial alcanzó el 6,3% en el caso de los hombres, y el 6% en el caso de las mujeres. Lo cual supone la diferencia más baja de toda la historia, y posiciona a España a la cabeza de Europa en emprendimiento femenino.

¿Qué acciones se pueden llevar a cabo para favorecer la incorporación de la mujer en el ecosistema startup?

Cuando la innovación es el motor o la palanca del negocio, la diversidad es esencial. Iniciativas como la red de Incubadoras de Alta Tecnología y los coworking digitales que hemos puesto en marcha en la Fundación INCYDE de las Cámaras de Comercio, y que están distribuidas por toda España, son herramientas que facilitan esta incorporación. Son infraestructuras tecnológicas en las que se cuenta con maquinaria de última tecnología, espacios adaptados y preparados, apoyo profesional y técnico y orientación empresarial. Tenemos que promover la creación de startups en nuestro país para ser un país emprendedor y óptimo para innovar, y estos centros ayudan a conseguirlo. 

¿A qué se debe la baja presencia femenina en el sector STEM? ¿Cómo se puede fomentar la vocación?

Como comentaba antes, en la educación de hace entre 25 y 30 años en España no se promovía tanto las enseñanzas STEM al género femenino. No se le prestaba atención a esa brecha que, sin darnos cuenta, se estaba produciendo. Y esta brecha hoy está teniendo sus resultados negativos. Sin embargo, creo que se está dando un giro relevante, promoviendo esta vocación tanto en la formación reglada como en numerosas instituciones que persiguen incentivar a las niñas en el mensaje de que “nada es imposible si sueñas y quieres hacerlo”.

En enero hubo una campaña de visibilización de las mujeres científicas bajo el lema #NoMoreMatildas. ¿Hacen falta referentes femeninos en este campo?

Sí. #NoMoreMatildas es un movimiento internacional muy potente que difunde los hallazgos de brillantes científicas a lo largo de la historia. Es muy importante que las niñas conozcan de estas mujeres, las estudien en los libros de texto, hablen de ellas en sus casas con sus padres, y vean que ellas también pueden alcanzar sus sueños. Sueños que parecía que únicamente eran cosas de hombres. 

Este rol también corresponde a los padres. Hay que concienciar a las familias. Lo que los niños ven en sus casas les marca las pautas para desarrollarse en el futuro. 

Terminamos imaginando: ¿cómo cree que será el futuro en términos de liderazgo y emprendimiento?

Creo que, gracias a iniciativas como esta, será realmente paritario. O al menos ese es mi sueño. Nada es imposible si sueñas y si de verdad quieres hacerlo. Hay que promover la plena igualdad de género de una manera inteligente porque será la única vía que traerá resultados positivos. Hacerlo imponiendo estereotipos o roles puede hacer que se nos vuelva en contra. Aquello que te obligan a hacer o que viene impuesto de fuera es justo lo que menos quieres hacer. Y este asunto es de gran importancia como para generar conflictos o rechazos morales que impidan su verdadera implementación. Así, no conseguiremos nada.

[hde_quote author=»Natalia Vázquez Poza» position=»Directora de Proyectos FEDER de la Fundación INCYDE»] Hay que promover la plena igualdad de género de una manera inteligente porque será la única vía que traerá resultados positivos [/hde_quote].

Las personas nos movemos por ilusiones, por aspiraciones y por implicación, no por imposición. La mejor manera de conseguir un liderazgo en plena igualdad pasa por educar a las generaciones futuras e inculcarles que pueden alcanzar todo aquello que imaginen y, sobre todo, darles referentes que sirvan de inspiración. Tenemos más oportunidades que nunca y más medios a nuestro alcance de los que jamás hubiéramos imaginado. Solo tenemos que conocerlos y sentirnos fuertes para lanzarnos a esa aventura que nos emociona: medir y valorar a las personas por lo que son y no por su género. 

Imágenes | Consorci Barcelona Zona Franca

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