En España, a día de hoy, hay 3,3 millones de trabajadores autónomos cuya cotización a la Seguridad Social supone uno de sus gastos más importantes.
Lo es por varias causas. En primer lugar, por ser un gasto obligatorio que se paga, se facture o no en ese mes. También porque este hecho conlleva que muchos trabajadores estén pagando por encima de sus posibilidades económicas.
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Todo esto va a cambiar con el nuevo sistema de cotización de los autónomos que empezará a aplicarse en 2023 y cuyas cuotas se calculan según su facturación. Esto conlleva un ahorro para buena parte de este colectivo.
La importancia de las cotizaciones del autónomo
Antes de explicar el nuevo sistema es importante recalcar la importancia que tiene la cotización del autónomo.
Mucha gente la relaciona solo con la jubilación: cuanto más se cotice, sobre todo en los últimos años, más se cobra. Pero no es la única razón por la que es relevante. A lo largo de la vida del autónomo, el riesgo de tener un accidente o contraer una enfermedad es evidente. Y la prestación que recibirán por incapacidad temporal es proporcional a su cotización.
En la actualidad, un 85 % de los autónomos cotizan por la base mínima. Una vez descontada la cuota, apenas supone un pago de 416 €. Por ello, tener un sistema más equilibrado que determine la cuota según los propios beneficios del autónomo puede ser más ventajoso.
Cómo se calculan las cotizaciones con el nuevo sistema
El nuevo régimen de cotización de los trabajadores por cuenta propia aprobado este verano se basa en la existencia de 15 tramos de cotización cuya cuantía se calcula según el nivel de ingresos del autónomo.
Tramo | Cuota 2023 | Cuota 2024 | Cuota 2025 |
Menos de 670 € | 230 € | 225 € | 200 € |
Entre 670 y 900 € | 260 € | 250 € | 220 € |
Entre 900 y 1166 € | 275 € | 267 € | 260 € |
Entre 1166 y 1300 € | 291 € | 291 € | 291 € |
Entre 1300 y 1500 € | 294 € | 294 € | 294 € |
Entre 1500 y 1700 € | 294 € | 294 € | 294 € |
Entre 1700 y 1850 € | 310 € | 320 € | 350 € |
Entre 1850 y 2030 € | 315 € | 325 € | 370 € |
Entre 2030 y 2330 € | 320 € | 330 € | 390 € |
Entre 2330 y 2760 € | 330 € | 340 € | 415 € |
Entre 2760 y 3190 € | 350 € | 360 € | 440 € |
Entre 3190 y 3620 € | 370 € | 380 € | 465 € |
Entre 3620 y 4050 € | 390 € | 400 € | 490 € |
Entre 4050 y 6000 € | 420 € | 445 € | 530 € |
Más de 6000 € | 500 € | 530 € | 590 € |
El resultado son unas cuotas que irán desde los 230 € (inferior a los 292 € de la cuota mínima actual) hasta los 500 €. Estas se revisarán al alza hasta 2025, último año con su coste ya fijado.
El resultado es que los que ganen menos mantendrán la cobertura mínima, pero con un precio menor. Mientras que el resto ajustará pagos y prestaciones a su realidad económica.
Como los ingresos pueden variar a lo largo del año, también se permite hacer más veces el cambio. En concreto, se pasa de poder cambiar cuatro veces al año la cuota a seis veces, cada dos meses.
Este cambio se puede tramitar de forma muy sencilla a través de la Sede Electrónica de la Seguridad Social, ya sea con certificado, Cl@ve o usuario y contraseña.
Qué pasa si estaba cotizando más
Aunque la mayoría de los autónomos se ven beneficiados por bajar su cuota, también existe un grupo que puede que cotice menos con el nuevo sistema y, con ello, el importe de sus prestaciones futuras baje.
A pesar de que el nuevo sistema implica que los autónomos se encuadren en un tramo con el que pagan la cuota según sus rendimientos, este sistema no es rígido. Así, la Seguridad Social es la encargada de revisar las cuotas, pudiéndose dar dos casos:
- Si el autónomo ha pagado de más, es decir, ha sobrecotizado, le propondrá devolver el exceso. Sin embargo, de forma voluntaria, siempre que en 2022 tuviera una base superior, puede denegar este exceso y seguir con su cotización más alta.
- Por el contrario, si ha pagado menos cuota de lo que debería, ha infracotizado, deberá pagar lo no abonado.
Un caso especial son los mayores de 48 años que tenían un tope por el que no podían subir su cotización en los años siguientes. Este se elimina y, a partir de 2023, podrán subir sus bases, incluso llegando a la base máxima.
Qué ocurre con los autónomos societarios
Otro cambio importante lo vemos en los autónomos societarios. Estos son todos aquellos que constituyen una sociedad mercantil, en cualquiera de sus formas.
Como representantes de la empresa, están obligados a cotizar como cualquier trabajador por cuenta propia. Con el nuevo sistema de cotización de los autónomos empezarán a cotizar por los ingresos reales a partir de 2023.
La diferencia está en que la base mínima de cotización está en 1000 € al mes, lo que supone una cuota de 310 € a partir del 2023. Muy inferior a los 377,87 € actuales.
En los años 2024 y 2025 esta cotización se determinará en los Presupuestos Generales del Estado. A partir del 2026 cotizarán por el régimen general, en concreto, por el grupo 7 de cotización de auxiliares administrativos.
Por último, el nuevo sistema permite la deducción de gastos de difícil justificación como compra de ordenadores en una cuantía del 7 % para los autónomos y del 3 % para los autónomos societarios.
En definitiva, este nuevo método de cálculo consensuado busca un mayor equilibrio entre ingresos, cotizaciones y, en consecuencia, con sus prestaciones. Con ello se busca que el autónomo tenga menos problemas económicos por el pago, pero también unas coberturas acordes a la situación económica de su negocio.
Por Antonio Luis Gallardo Sánchez-Toledo
Imágenes | Pexels Marina Agrelo cottonbro Malte Luk