La COVID-19 ha cambiado el comportamiento de los usuarios en internet. Las webs de comida para llevar, de recetas gastronómicas o las orientadas a la salud y el bienestar han experimentado un importante aumento del tráfico. Mientras, términos y expresiones como “geles desinfectantes”, “mascarillas”, “esterillas de yoga” o “levadura para hacer pan” se han situado entre los más buscados.
El comercio online, en según qué sectores, ha crecido enormemente. Ante este cambio de tendencia, los grandes beneficiados han sido los negocios que ya tenían un buen posicionamiento orgánico en la lista de resultados de Google u otros buscadores, y que han visto cómo se disparaba su volumen de ventas.
[hde_related]
Por contra, la demanda de numerosos productos y servicios, como los relacionados con el sector textil y de viajes, se ha reducido drásticamente por el estado de alarma, lo que ha sumido a muchos negocios en una profunda crisis. Esto les ha llevado irremediablemente a la reducción de la inversión y al ahorro de costes; también en lo que respecta a sus estrategias SEO.
Sin embargo, en el SEO debemos pensar siempre en el medio-largo plazo y cancelar todas las acciones relacionadas con él podría condenar a las empresas a una recuperación mucho más lenta una vez haya pasado la tormenta.
Es cierto que la incertidumbre es muy grande, que muchos negocios no saben cuándo podrán volver a generar ingresos, pero no es menos cierto que la crisis pasará y nos repondremos. Por tanto, hay razones poderosas para seguir apostando por el posicionamiento en tiempos de coronavirus.
Generar contenido de interés
El contenido es una de las mejores opciones de marketing online por las que puede decantarse una empresa. Porque llega directo al usuario y porque ayuda a mejorar el posicionamiento de cualquier sitio web. En caso de haber tenido que parar la producción o reducirla significativamente, este es un buen momento para dedicar tiempo a la creación de contenidos optimizados, de calidad y relevantes, que mejoren esa visibilidad web y conecten con nuestros públicos objetivos.
Respecto a los contenidos más antiguos, conviene analizarlos y, si es preciso, hacer redirecciones entre ellos, fusionar varios en uno y dejar claro a Google con qué keywords esperamos atraer usuarios, posicionarnos de manera satisfactoria y generar ventas.
Ahora que estamos mucho más tiempo en internet, los tiempos de lectura han subido notablemente y la atención se dirige a aquellas marcas que están sabiendo aprovechar el momento. También se trata de estar preparados para cuando las cosas vuelvan a normalidad. Porque los usuarios regresarán, por ejemplo, con más ganas de viajar y la empresa tendrá que figurar en los resultados de búsqueda con contenidos valiosos que conduzcan a decisiones de compra informadas.
Potenciar los contenidos en las redes sociales
En combinación con el marketing de contenidos, es aconsejable mantener una buena estrategia de comunicación en las redes sociales. En este sentido, no es necesario publicar mucho, sino ser eficientes y claros en nuestros mensajes.
Hay que fidelizar a la audiencia y mantener actualizados nuestros perfiles sociales para que sepan que seguimos con ella, apoyándola, aunque nuestra actividad comercial se haya visto reducida o paralizada. Se puede conectar con el público a través de retos, descuentos, encuestas, curiosidades…
Rediseñar la página web
La página web o la tienda online son en muchas ocasiones los grandes olvidados. Numerosas empresas apuestan por realizar una publicidad digital intensa, pero descuidan su sitio web y las ventajas que puede aportarles un diseño óptimo.
Así, quizás sea el momento para cambiar la imagen de la web y apostar por una interfaz más amigable que ofrezca al usuario una experiencia de navegación más satisfactoria. Ahora se pueden hacer modificaciones y pruebas sin que afecten de forma notoria al negocio.
Según los expertos, la clave del diseño web para un plan de marketing digital efectivo está en la landing page o página de aterrizaje, hacia la que dirigimos al usuario para destacar un producto o servicio. Por ello, es aconsejable que logre concentrar toda la atención del visitante en la CTA o llamada a la acción (herramienta visual o escrita para que el cliente realice una acción concreta), así como destacar ofertas y beneficios, y utilizar titulares impactantes e interesantes. Desde esa landing se tratará de recuperar la confianza tras la crisis y la comunicación directa con el usuario, además de recibir a cualquier nuevo visitante con los brazos abiertos.
SEO Móvil
La estrategia SEO debe tener en cuenta, ahora más que nunca, el uso de los dispositivos móviles, que se ha disparado como consecuencia del coronavirus. En pocas palabras, si la página web no está diseñada para responder al auge de la navegación móvil, que ya no solo se utiliza para buscar información, sino también para hacer compras, sencillamente habrá pocas posibilidades de mejorar la posición en los buscadores.
Por eso se impone aprovechar estos momentos para asegurarse de que el diseño de la página está pensado principalmente para móviles, adaptable a pantallas más grandes con facilidad, porque el concepto mobile first es uno de los que mejores resultados muestra de cara al posicionamiento SEO. Todo debe funcionar de forma eficiente en ese entorno.
Formación online
Ante este panorama inédito, la formación online está en pleno auge. Y es que son muchas las personas que están aprovechando el tiempo para formarse, máxime ahora que numerosas plataformas ofrecen contenidos gratis.
Indudablemente, formarnos en aquellas áreas de la estrategia digital que más interesan a la empresa puede ser muy beneficioso para cuando todo se recupere.
Como ha ocurrido con crisis anteriores, la causada por la COVID-19 terminará, y previsiblemente lo hará de forma gradual en los próximos meses. La pregunta que debemos hacernos es cómo deseamos que nuestras empresas estén en el mundo digital cuando regresemos a la normalidad, si visibles o invisibles.
Imágenes | Gerd Altmann (Pixabay) | Photo Mix (Pixabay) | Hal Gatewood (Unsplash)