La pandemia de COVID-19 ha marcado 2020 y, probablemente, la década que inauguraremos el próximo 1 de enero. Resolver los problemas complejos que ha supuesto la rápida expansión del coronavirus ha resaltado la importancia de la colaboración y la innovación. Pero la pandemia no es el único gran desafío que tenemos delante, empezando por el cambio climático y la transformación económica necesaria para hacerle frente. El informe ‘Markets of Tomorrow’ del Foro Económico Mundial ha identificado los 20 mercados que tienen el potencial de cambiar el mundo durante la próxima década; y lo harán a través de la tecnología, nuevas configuraciones sociales o una combinación de ambos factores.
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Mercados emergentes en la próxima década
“Debemos asegurarnos de que las nuevas actividades económicas no solo generen crecimiento, sino que también brinden soluciones a los problemas”, señala Saadia Zahidi, directora general del Foro Económico Mundial. “El futuro de nuestras economías, sociedades y el planeta depende del desarrollo de estos nuevos mercados, inclusivos y sostenibles”. Estos son los 20 mercados identificados por el informe.
1. La inteligencia artificial (IA)
La IA ha sido identificada como una tecnología de utilidad general, con potencial para afectar a toda la economía al igual que en su día hicieron la máquina de vapor o la electricidad. Aunque las aplicaciones de la inteligencia artificial ya se han ido dejando ver estos últimos años, según el informe la IA crecerá como un mercado en sí mismo, con servicios as-a-service y plataformas de intercambio y comercio de código y algoritmos.
2. Los antivirales de amplio espectro
Si hubiésemos tenido medicamentos que afectasen a las infecciones víricas como los antibióticos afectan a las bacteriológicas, la historia de la pandemia habría sido muy diferente. El desarrollo de los llamados antivirales de amplio espectro ya era un objetivo prioritario de la industria farmacéutica antes de la COVID-19, pero su necesidad es ahora mucho más evidente.
3. Los cuidados y la asistencia
La importancia del cuidado de la salud más allá de los hospitales y centros médicos ha vuelto a quedar patente durante la pandemia. La asistencia a menores, mayores o dependientes se lleva a cabo, en la mayoría de los países, de forma informal. Según el Foro Económico Mundial, impulsar el desarrollo de un mercado de los cuidados podría tener impactos muy positivos económicos (crecimiento) y sociales (liberando a ciertos grupos y, en particular, a las mujeres de las tareas informales de asistencia).
4. Los mercados de datos
El potencial económico que esconde la información ha hecho que los datos se hayan llegado a señalar como el nuevo petróleo. Sin embargo, la realidad es que todavía faltan muchos frentes por cerrar para considerar el mercado de los datos un mercado maduro. La capacidad de aprovechar todos los datos que generamos, la definición de las relaciones comerciales entre quien produce los datos y quien les saca partido o asegurar la calidad y la interoperabilidad mediante estándares son algunos de los asuntos por resolver en la próxima década, según el Foro Económico Mundial.
5. Los servicios financieros digitales
El mundo de las fintech ha despegado en los últimos años, pero la próxima década será la de su impulso definitivo. Aunque todavía hay algunos desafíos regulatorios por resolver, el informe señala que los pagos, créditos, seguros y servicios de inversiones digitales transformarán los mercados financieros globales y, en particular, los de las economías emergentes.
6. La tecnología educativa y el reciclaje profesional
La pandemia ha acelerado algunos cambios que hacía años que se venían gestando en el mercado laboral asociados, en gran medida, a la digitalización del trabajo. El reciclaje profesional o reskilling ha sido señalado en numerosas ocasiones como algo prioritario si no se quiere que la revolución tecnológica deje de lado a una parte importante de la población. Esta necesidad, junto con el auge de las nuevas tecnologías educativas, abre la puerta a nuevas oportunidades.
7. La irrupción de los vehículos eléctricos
Cada vez más países se comprometen a reducir su huella de CO2 de forma importante en 2030 con vistas a lograr la neutralidad de carbono a mediados de siglo. En este camino, el cambio del modelo de transporte y la electrificación de la flota de vehículos es una piedra importante. Según el informe, la industria de la automoción y las administraciones impulsarán el mercado de los vehículos eléctricos durante la próxima década.
8. Las tecnologías genéticas
Dos de las primeras vacunas aprobadas contra la COVID-19 requieren la reconstrucción de material genético en laboratorio. No se trata de una tecnología nueva, pero muestra el gran potencial de la revolución genética que hemos vivido desde finales del siglo pasado. Según el Foro Económico Mundial, las posibilidades que se abrirán en la próxima década van desde aplicaciones médicas hasta la creación de nuevos materiales. Sin embargo, señalan, todavía quedan por resolver muchos debates éticos y regulatorios.
9. Los derechos de emisión de gases de efecto invernadero
Hasta la fecha, una de las herramientas en la lucha contra el cambio climático ha sido el establecimiento de derechos de emisión de gases de efecto invernadero. Con estos derechos se puede comerciar en una serie de mercados regionales, pero, tal como recoge el informe, es probable que en la próxima década emerja un mercado global. Aun así, subraya, los derechos de emisión deben alinearse con los objetivos ambientales si queremos que la herramienta sea efectiva.
10. El auge del hidrógeno
La promesa del hidrógeno como combustible limpio para el transporte y la calefacción lleva años sobre la mesa. Sin embargo, el abaratamiento de la energía de origen renovable empieza a convertir su producción a gran escala en una alternativa real. Sin embargo, todavía es necesario seguir invirtiendo en su desarrollo para que se convierta en un mercado sólido.
11. El Hyperloop y los nuevos transportes colectivos
Sustituir coches contaminantes por coches limpios no va a ser la solución definitiva contra el cambio climático. Cada vez más expertos señalan que es necesario un cambio del modelo de transporte, priorizando los medios colectivos. En este escenario, desde la esfera tecnológica se han propuesto algunas soluciones que entrarán previsiblemente en funcionamiento a finales de la próxima década, como el Hyperloop.
12. Los nuevos antibióticos
Si antes señalábamos la importancia del desarrollo de antivirales de amplio espectro, el mercado de los antibióticos también afronta sus propios desafíos. La resistencia a estos medicamentos es una causa de cada vez mayor preocupación. Así, se espera que la inversión en el desarrollo de nuevos antibióticos aumente considerablemente durante los próximos 10 años.
13. La industria del reciclaje de los plásticos
La reducción de los residuos plásticos es prioritaria y, para ello, es necesario un cambio en el modelo de producción y consumo. Aun así, la generación de plásticos no ha dejado de crecer, impulsando de forma paralela la industria del reciclaje. Sin embargo, menos del 20% de los plásticos producidos acaban siendo reciclados. Durante los siguientes años, el mercado del reciclaje podría seguir creciendo si consigue ser más eficiente en sus procesos y aumentar la demanda de productos reciclados.
14. La medicina de precisión y los medicamentos huérfanos
Cerca de 300 millones de personas sufren alguna enfermedad rara para la que no existe tratamiento. Hasta ahora, las farmacéuticas no han estado interesadas en el desarrollo de los llamados medicamentos huérfanos porque los beneficios son limitados o inexistentes. Sin embargo, el análisis de datos y la supercomputación están abaratando los costes de descubrir nuevos medicamentos efectivos, abriendo las puertas a la medicina de precisión y a los tratamientos personalizados.
15. La restauración de ecosistemas
Atrapar CO2 es una de las soluciones propuestas para reducir la presencia de gases de efecto invernadero en la atmósfera. A día de hoy, la tecnología más eficiente para ello es la que nos presenta la propia naturaleza. Por eso, el Foro Económico Mundial estima que el mercado de la restauración de ecosistemas y, en particular, el de los servicios de reforestación, crecerán durante la próxima década.
16. Los servicios satelitales
La creación de una industria espacial con un peso cada vez mayor del capital privado tiene varias consecuencias. Una de ellas es el desarrollo del mercado de los servicios satelitales más allá de la geolocalización y la comunicación para lugares remotos.
17. Los vuelos espaciales
La otra gran consecuencia es el desarrollo del mercado de los vuelos espaciales, tanto para misiones de agencias públicas como para viajes privados. Colaboraciones como la que mantiene la NASA con SpaceX (que a su vez colabora con otras compañías como Boeing) están impulsando un nuevo escenario económico y una nueva carrera espacial.
18. El mercado de las habilidades
En un escenario laboral tan cambiante como el actual, las habilidades de los trabajadores son las que marcan la diferencia en los resultados de las empresas y en la estabilidad laboral de las personas. De acuerdo con el Foro Económico Mundial, las organizaciones empezarán a tratar algunas de estas habilidades, y los procesos de reciclaje profesional y retención del talento asociados a ellas, como activos propios, dándoles mucho más valor.
19. Los seguros sociales
En los países con una red de servicios sociales garantizados por el estado, algunos seguros, como el de desempleo o la pensión de jubilación, han experimentado la introducción de fórmulas innovadoras y la entrada de capital. Para el Foro Económico Mundial, la colaboración entre el sector público y privado será clave en el desarrollo de un mercado que aporte más eficiencia y flexibilidad a ciertas protecciones sociales.
20. Los derechos del agua
La cotización del agua en bolsa ha marcado parte de la actualidad informativa en las últimas semanas del año. En realidad, lo que se cotiza son sus derechos de gestión, ya que el agua se considera un bien público. El mercado que rodea estos derechos seguirá creciendo en el futuro a medida que la escasez de agua y el aumento de la demanda hagan necesaria una gestión más eficiente y el desarrollo de productos financieros asociados, como seguros o créditos.
En definitiva, el Foro Económico Mundial augura una década en la que la innovación tecnológica sea protagonista, pero como herramienta para cambiar las cosas. Con un horizonte inmediato marcado por el cambio climático, la sostenibilidad, la estabilidad social y, sobre todo, el cuidado de la salud, serán también sectores emergentes.
Imágenes | Unsplash/SpaceX, Jack Finnigan, CHUTTERSNAP, National Cancer Institute, Bill Jelen
