España arrastra varias carencias en innovación y tecnología. Una de las más graves es el escaso número de empresas que integran talento TIC, lo que lastra la competitividad de las firmas nacionales respecto a los países de nuestro entorno. Captar el talento tecnológico e integrarlo adecuadamente según el tamaño y los medios de la compañía es ya vital, y lo será aún más en los años venideros. Por eso es fundamental identificar los huecos en la plantilla, saber dónde buscar y, sobre todo, tratar a estos perfiles como lo que son, profesionales altamente cualificados que aportan un enorme valor a la empresa.
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El problema
El principal motivo por el que las empresas patrias no contratan a empleados versados en tecnología es tan sencillo como preocupante: existe un déficit sangrante de este tipo de perfiles.
Según el informe ‘Empleabilidad y talento digital’, elaborado por la fundación VASS y la Universidad Autónoma de Madrid, España es el país europeo donde más ha crecido el número de empresas que ofrecen trabajo a especialistas TIC en los últimos siete años, con hasta 160 000 compañías con vacantes de este tipo. Sin embargo, los recién titulados en estas competencias que anualmente se incorporan al mercado laboral son solo 25 000, lo que significa que cada demandante puede elegir entre seis empresas empleadoras.
Según el documento, de resolverse esta falta de talento digital, nuestro país crearía un 15% más de empleo especializado y aportaría más de 360 millones de euros al año a la economía a través del sector TIC. No obstante, el sector tecnológico es solo una porción del pastel: a los expertos digitales se les ofrece trabajo en el 47% de las grandes empresas y en el 11% de las pymes, que intentan acometer contrarreloj su transformación digital.
¿Qué estamos buscando?
Los vertiginosos cambios que impulsa la ya mencionada transformación digital obligan al conjunto de la población a poseer un mínimo de habilidades tecnológicas, necesarias para desenvolverse en la vida laboral y privada. Pero como en cualquier otro ámbito del conocimiento, los especialistas son imprescindibles.
A los expertos en este campo se les conoce como profesionales de las Tecnologías de la Información y de las Comunicaciones (TIC). El análisis ‘Evolución de los perfiles profesionales TIC en la sociedad del conocimiento’, elaborado por la patronal del sector tecnológico Ametic, sintetiza las características de la empleabilidad TIC:
- Responsabilidad de autoformación por parte de los profesionales del ramo, debido a la rápida obsolescencia de los conocimientos requeridos.
- Fuerte rotación en el empleo debido a la inestabilidad de la demanda laboral en el proceso de búsqueda de competencias concretas, siempre cambiantes.
- Se trata de perfiles íntimamente ligados a la evolución tecnológica y altamente dependientes de ella.
Hablamos de todo un árbol de conocimientos técnicos, por lo que la gestión de recursos humanos de la empresa debe hacer una caracterización precisa del tipo de habilidades que requiere la vacante en cuestión. Es necesario determinar si se necesita a alguien versado en posicionamiento web o a un experto en marketing digital; un arquitecto de datos o un programador; un especialista en incidencias informáticas o uno en ciberseguridad, etc.
Este debe ser un paso previo no solamente a la planificación de las contrataciones externas, sino también de cara a los procesos de formación interna del personal en plantilla.
La captación: varear el árbol que dé frutos
Si la empresa quiere llenar una vacante que exige unas competencias específicas, la búsqueda del candidato también debe serlo. Si bien no hay que descuidar los canales convencionales (portales de empleo generalistas, LinkedIn, ferias, etc.), el rastreo de talento TIC tiene a su servicio herramientas más afinadas.
Existen diversas web dedicadas en exclusiva al empleo tecnológico, como Ticjob o Tecnoempleo. Cabe destacar la plataforma We Are Hiring, el primer portal español enfocado exclusivamente al talento digital, con una oferta muy especializada, en la que se pueden encontrar desde desarrolladores web hasta data scientists.
Cortejando a los candidatos
Las claves para atraer al talento TIC son las mismas que para cualquier otro colectivo laboral, pero la escasez de estos perfiles y su estrecha ligazón con los siempre meteóricos cambios técnicos hace que algunas de estas claves merezcan mucho más énfasis que otras.
- Conciliación de la vida laboral y familiar: algo que únicamente puede conseguirse con unos horarios razonables. Las tareas de las que se ocupan los profesionales tecnológicos son -y ellos lo saben- muy favorables para el teletrabajo.
- Proyección: tratándose de especialistas tan demandados, la decisión de firmar por una empresa u otra puede muy bien estar determinada por las posibilidades de un ascenso rápido y sin cortapisas.
- Formación: los perfiles TIC deben estar renovándose constantemente, al ritmo de una evolución tecnológica cada vez más vertiginosa. La formación continua y estructurada, bien organizada y sin menoscabos para el trabajador, es un reclamo de valor incalculable.
- Remuneración: un 45% de los profesionales TIC en España cobra menos de 22 000 euros anuales, una retribución inferior a la media de nuestro país (23 300 euros). No es de extrañar, por tanto, que muchos emigren. Si se quiere al mejor candidato, hay que ofrecerle un salario acorde a su preparación y a su nivel técnico.
Por José Sánchez Mendoza
Imágenes | @charlesdeluvio y @wocintechchat en Unsplash