Guía rápida para empezar a vender en Amazon

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Empresa

El fenómeno Amazon ha cambiado el sector del retail en todo el mundo y también en España.

La compañía de Jeff Bezos es una plataforma en la que se venden cada año productos por valor de unos 200.000 millones de dólares. En España, Amazon cuenta con más de 25 millones de compradores, más de la mitad de la población. [hde_related]

En el mundo son más de 330 millones las personas que acuden a este sitio para hacerse con cualquier cosa que a uno se le ocurra, desde un bolígrafo a una nevera, un set completo de aire acondicionado para la casa o todos los muebles del salón. Pasando por cosas tan raras como un papel de váter con la cara de Donald Trump o un paraguas con forma de rifle. 

Si no puedes con Amazon, únete

Muchos comercios han intentado competir con Amazon y han salido perdiendo. Por disponibilidad de producto, precios, servicio posventa, rapidez de entrega o capacidad de sugerencia de nuevos compras, Amazon es casi imbatible. Pero si uno no puede competir con un gran rival, a lo mejor vale la pena unirse a él. 

De hecho, Amazon facilita esta colaboración porque en realidad es un marketplace, es decir, un gigantesco mercado donde la mitad de lo que vende es de terceros. Marcas, mayoristas, distribuidores y tiendas más o menos especializadas acuden a Amazon para ganar visibilidad, redondear sus ventas o tener presencia en países en los que, de otra manera, no podrían estar.  

Los que se aventuren a vender en Amazon no necesitarán disponer de grandes infraestructuras logísticas o de conocimiento para desarrollar una tienda online. Crearse una cuenta de proveedor y empezar a subir productos con fotos y características es relativamente sencillo y, sobre todo, no requiere de conocimientos técnicos. Aquí ofrecemos una serie de ideas y consejos para empezar a vender a través del mayor site de e-commerce del mundo. 

Primeras decisiones para entrar en Amazon

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1. Cómo decido lo que vendo

Antes de empezar a vender conviene hacer un poco de estudio de mercado. Por ejemplo, yendo en Amazon a la categoría que concuerda con nuestros productos y viendo cuáles son los más vendidos. Para afinar más, puedes instalar, previo pago, la extensión de Chrome JungleScout, que te dará estadísticas de venta reales en Amazon de cada modelo de producto en cuestión, así como del beneficio estimado que aportará el mismo. También te mostrará las reseñas de un producto, lo que puede ser un buen indicador del interés que despierta y de los puntos que más valoran los compradores.

2. Qué precio tengo que poner 

Si tienes una tienda física y ya vendes allí el producto, ese precio puede servir de referencia, pero no tiene por qué ser definitivo. Puede que en Amazon ese PVP no sea competitivo. Por eso hay que ver con detenimiento los precios de la competencia. De esta estimación dependerá tu margen de beneficio. 

De todas formas, conviene advertir que Amazon es un entorno duro y muy competitivo donde los usuarios se van irremediablemente al producto más barato. Además, hay que tener en cuenta las malas prácticas de los vendedores indirectos que, con sistemas automatizados, siempre tienen disponible sus productos un céntimo por debajo del más barato en el mercado.

3. Registro como vendedor

Tenemos que dar datos como el país, el tipo de empresa, una tarjeta de crédito, datos bancarios y algunos datos personales. Te puedes dar de alta como vendedor profesional o individual. Lo habitual es dar de alta como profesional. Vendor Central y Seller Central son las dos plataformas para vender productos en Amazon. Suenan muy parecido, pero cada una se dirige a un tipo de proveedor diferente. 

Vendor Central es la plataforma ideal para grandes marcas proveedoras y fabricantes que quieren comercializar grandes volúmenes de producto. En este caso, el proveedor le vende directamente los productos a Amazon, que luego los revende a través de su marketplace y le asigna la etiqueta de “Vendido por Amazon”. Es una especie de venta al por mayor que requiere invitación expresa por parte de la propia Amazon.

En el caso de tratarse de una empresa pequeña, lo ideal sería usar la plataforma Seller Central. En este caso es el vendedor el que se encarga de todo lo relacionado con las ventas de los productos, como fichas de información, fotografías, establecimiento de precios y logística, aunque este último punto lo puede asumir Amazon si se desea. 

4. Da de alta tu catálogo de producto 

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Cuando estés en el apartado de inventario agregando productos, Amazon te pedirá que busques por el código de barras tu referencia entre las que ya se venden en el marketplace. Es para ahorrarte tiempo, porque de esta manera posiblemente no necesites volver a introducir los datos. 

En todo caso, siempre podrás añadir cualquier información que estimes. Si tu producto no hubiera sido subido por nadie antes, tendrás que hacerlo y poner las categorías y subcategorías a las que pertenece, además de características como marca, peso, color, etcétera.  

5. Añade fotos que seduzcan 

El tema gráfico es fundamental y muchas veces la elección del cliente tiene que ver con el poder de seducción de las fotos que colgamos. Las fotos tienen que ser de buen tamaño y alta calidad, donde primen los primeros planos y que permitan ver los detalles si se amplían. Conviene mostrar los productos desde varios ángulos y recortarlos sobre un fondo blanco. 

7. Envío logístico de Amazon

Cuando alguien compra un producto, recibimos una notificación en el panel de Seller Central. Aquí, puedes asumir tú la gestión del envío o contratar el servicio a Amazon, en la parte de logística (Fulfillment by Amazon o FBA). 

Si te decides por esta segunda opción, tendrás que enviar el producto a los almacenes de Amazon en Europa. Eso lo puedes hacer también a través de Seller Central. Además de la gestión del envío, Amazon se encargará de las devoluciones y la atención al cliente. Te conviene mostrar el distintivo “Gestionado por Amazon” porque a los compradores les da confianza. 

8. Cómo contabilizo lo que vendo

Los clientes pagarán a través de los sistemas de Amazon, que gestiona también este punto. De esta manera, no tendrás que configurar un TPV y sólo bastará con dar tu cuenta bancaria para recibir los ingresos, aunque estos no llegarán al momento, sino pasados 15 días. En caso de devoluciones, Amazon retendrá el importe de la compra hasta que se resuelva la misma.  

Imágenes | iStock.com/AdrianHancu / Nito100 / Jetcityimage

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