Huawei, la empresa de tecnología orientada a las telecomunicaciones, ya tiene tres CEOs o directores ejecutivos. Pero no todos ellos actúan todo el tiempo como tales. Desde hace años practican una interesante estrategia llamada “CEOs rotatorios”, con la que se turnan. ¿Pueden sus ventajas aplicarse a una pyme española?
Contar con una elevada rotación en la dirección de una pyme aporta flexibilidad, la suma de más puntos de vista, la posibilidad de ser más innovadores o de evitar el estrés del mando, entre otras ventajas. Analicemos la aplicación de los CEOs rotatorios a las pymes españolas.
¿Por qué Huawei cambia de CEO cada seis meses?
Guo Ping, uno de los tres CEOs, explicó a la publicación ‘Fortune’ el motivo de su estrategia usando una metáfora: “Las aves migratorias que vuelan a través del océano Atlántico siempre lo hacen en formación de V, pero el que conduce el equipo no siempre es el mismo pájaro. Cambian y rotan para llevar al equipo completo a través del océano”.
Las aves vuelan en forma de V para optimizar el gasto energético. Ahorran energía al sincronizar el movimiento de sus aleteos. Todas menos la que va en cabeza, a la que podríamos llamar “directora”. Para evitar que el estrés y cansancio hagan mella en el animal a largo plazo, rotan su posición. En Huawei, funciona. Durante los tres primeros años su beneficio aumentó un 76%.
CEO no significa propietario
El 44,3% de las marcas de nuestro país tiene entre 2 y 249 empleados (hay un 55,6% de micropymes sin asalariados), por lo que puede usar la estrategia del CEO rotatorio. Un factor clave para entender esto es que CEO no significa propietario. La mayoría de directores ejecutivos son asalariados.
En otras palabras, parte de la plantilla cercana a la dirección puede encargarse cada cierto tiempo del rol de CEO. El grueso de las pymes españolas tienen, además de director ejecutivo, uno para Marketing, Recursos Humanos, Operaciones, etc., en función de su tipo de negocio.
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Adaptar la estrategia de Huawei a la pyme sin invertir en personal externo podría partir de rotar algunas de las funciones de estos roles de la jerarquía superior. Suponiendo que haya jerarquía, claro, y siempre teniendo en cuenta la complejidad de delegar tareas. Pero los CEOs rotatorios traen ventajas asociadas. Veamos cuáles:
Flexibilidad en la dirección y toma de decisiones
Una empresa con dos o tres CEOs no se para cuando el director está enfermo o cuando viaja. Siempre hay un backup al día de todo lo que pasa que puede asumir las funciones en un par de minutos. Este tipo de flexibilidad es necesaria en muchos sectores en los que posponer decisiones supone pérdidas.
“Cuatro ojos ven más que dos”
Y seis más que cuatro. Uno de los puntos fuertes de Huawei es la capacidad que tienen para interpretar amenazas y puntos fuertes. Hay tres personas mirando. Dos de ellas en retaguardia, lo que no significa ociosos. Esta estructura también ayuda a ver nuevas ideas de negocio, probar estrategias nuevas e innovar.
Evitar el estrés de la dirección
Al igual que las aves migratorias intercambian posiciones para no sucumbir al cansancio, contar con un “CEO de repuesto” puede ayudar a liberar el estrés de la dirección. Cuando decenas o cientos de personas dependen de ti y la empresa pende de cada decisión que tomas, acumulas estrés.
Tener una perspectiva más realista de la compañía
Quizá es el punto más importante. ¿Cuántos directores ejecutivos están conectados a sus empleados? Cuando una pyme intercambia cada seis meses al director ejecutivo por, pongamos, el responsable de Recursos Humanos o el de Producción, el CEO ‘baja’ en el organigrama durante un tiempo.
Tener un contacto directo con los mandos intermedios es clave para entender qué palpita en la compañía. También tomar contacto con los trabajadores. El poder ser más consciente de los problemas internos o de las metas de cada trabajador.
Esta estrategia es muy fácil de llevar a cabo en micropymes, especialmente cuando los miembros constituyentes se reparten las labores. En empresas más grandes, sin embargo, adaptar una estrategia así puede ser complicado. Y no todo son ventajas.
La desventaja de tener más de un CEO
RIM es una marca no demasiado conocida, pero la podemos ubicar señalando que fabrica los productos BlackBerry. Al igual que Huawei, RIM tiene más de un CEO. En concreto dos. Todo fue bien durante años, hasta que ambos CEO intentaron llevar la compañía por caminos diferentes.
Podríamos llamar al caso de estudio “bicefalea” por el dolor de cabeza que ambas personas han dado a la empresa. En 2011, cada líder tiraba de la compañía en una dirección, fracturándola y haciendo que el siguiente nivel de gestores tuviese que elegir bando. Esto produjo enormes tensiones.
Contar con más de un CEO tiene ventajas positivas siempre que haya consenso, escucha y complicidad entre ellos. Diálogo y la voluntad de ceder en algunas situaciones con las que no se está de acuerdo. De nada sirve deshacer lo que tu compañero hizo seis meses atrás cada seis meses.
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