El traspaso de un negocio es la forma habitual y rápida que eligen muchos de los que se deciden a emprender, pero igualmente puede ser un generador de posibles engaños y de problemas. Veamos cómo evitarlos.
¿Qué entendemos por traspaso?
El traspaso viene definido por la RAE como la “cesión a favor de otra persona del dominio de algo” y su casi única regulación viene determinada en Ley de Arrendamientos Urbanos, en el Artículo 32, de Cesión del contrato y subarriendo, debiéndose fijar todos los aspectos en el contrato de traspaso, que es el documento mercantil que regulará la operación.
Pero, ¿qué sucede en la práctica? La persona que traspasa vende la actividad, por lo que deja de ser el titular de su empresa, que hasta este momento gestionaba el negocio. En muchos casos supone incluso su baja como autónomo, apareciendo en escena la persona que adquiere el traspaso, que, en algunas ocasiones, será preciso que se convierta en autónomo.
Quién es quién en un traspaso
Son varias las personas que intervienen en un traspaso, y que debemos tener claramente identificadas:
- El que traspasa: La persona que es titular de la licencia de apertura y que figura como arrendador en el actual contrato de alquiler del local, siendo quien fije el precio que considere para dicho traspaso.
- El dueño del local: Es la persona que figura como arrendadora del local y su papel es importante, ya que fijará las nuevas condiciones para el local que sirve de base del negocio.
- El que compra: Es la persona que paga el precio del traspaso y que explotará la actividad a partir de ese momento.
Qué documentación implica un traspaso
En un traspaso hay que controlar una documentación básica, siendo conveniente que la supervise un especialista:
- El contrato de traspaso, en el que se van a fijar las condiciones de dicho traspaso, el precio y el inventario de todas las cosas que se traspasan.
- El contrato de alquiler del local. Aquí es importante saber que, en ocasiones, se ponen cláusulas que impiden realizar traspasos.
- El cambio de titularidad de la licencia de apertura, que es el documento que hay que entregar al Ayuntamiento, a su departamento de urbanismo, para poder realizar el cambio. Hay que tener en cuenta que normalmente lleva aparejada una tasa municipal que habrá que abonar.
- Los contratos de suministros, tales como agua y luz, entre otros, deben cambiarse de titular, en el caso de que no se quiera un alta nueva.
Cómo valorar el traspaso
Es uno de los aspectos más importantes y en los que normalmente se presta menos atención, ya que en muchas ocasiones no se profundiza en el valor de lo que nos están traspasando.
En este sentido, para valorar correctamente el contrato de traspaso que nos planteen, es necesario tener en cuenta lo siguiente:
- Disponer de un precontrato de traspaso con todas las condiciones que deban cumplir la parte vendedora y compradora. En el mismo, se debe adjuntar un inventario, que incluya el desglose de cada uno de los elementos materiales traspasados, detallando las características de cada uno, así como su importe individualizado.
- En el caso de incluir vehículos, equipos informáticos o elementos de inmovilizado similares se deben detallar las características técnicas de los mismos y su año de adquisición.
- En el caso de que se traspasen elementos que lleven aparejado un contrato de mantenimiento o licencias de uso, por ejemplo software, extintores, etc., se debe incluir copia del contrato actual.
- Copia del contrato de alquiler vigente del local, donde vengan claramente las condiciones, de manera que sea posible acudir al dueño del local para negociarlas.
- Para el análisis económico puro y duro:
- Cuenta de pérdidas y ganancias y balance de situación de los últimos tres ejercicios.
- Cuadro de cash-flow de los tres últimos ejercicios.
- Para valorar, no solo la parte material, sino su fondo de comercio, necesitamos que el vendedor nos facilite datos de la cartera de clientes. Si es posible, lo mejor será la base de datos de clientes para fidelizarlos y poder estimar el valor económico que pueda tener.
- Fotografías del estado actual del local, su fachada y sus distintas estancias.
- Fotocopia de la documentación de apertura
Aspectos a tener en cuenta para no equivocarte con un traspaso
Es conveniente, antes de decidirnos a pagar un traspaso de un negocio, tener en cuenta una serie de aspectos:
- Es conveniente ir al Ayuntamiento, a urbanismo del municipio donde esté el local, ya que son los encargados de tramitar las licencias de apertura. El objetivo de esta visita es doble, por un lado, informarnos de los trámites y documentación que tenemos que tener en cuenta para realizar el cambio de titularidad de la licencia; y, por otro lado, preguntar y conocer el estado actual de vigencia y legalidad de la licencia actual.
- Preguntar a todas las partes implicadas para ver si el negocio funciona o ha funcionado tal y como dicen. Además, se puede consultar a los vecinos e intentar averiguar informalmente toda la historia de dicho local, cambios de propietarios, etc.
- Es recomendable controlar qué pasará con los trabajadores actuales de la empresa, ya que, aunque en teoría, no deberíamos tener relación laboral con ellos, lo mismo nos interesa contar con alguno de los empleados.
Javier Navarro