Creada por tres amigos veinteañeros en 2015, en solo tres años la aplicación de Mr. Jeff (ahora Jeff) se convirtió en la franquicia de lavanderías número uno del mercado. Actualmente está presente en más de 40 países y cuenta con más de 200 empleados directos.
En 2019, llevaron a cabo un rebranding y expandieron el negocio para incluir servicios de belleza, peluquería y masajes; Mr. Jeff, Beauty Jeff, Fit Jeff y Relax Jeff. El lema de la startup es ‘the good, good life’ (‘la buena, buena vida’), toda una declaración de intenciones.
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Antes de Jeff, fundó dos negocios con sus socios. ¿Tenían claro que lo suyo era emprender?
Rubén, Adrián y yo nos conocimos en 2010 en el Colegio Mayor San Isidoro de León mientras estudiábamos en la universidad. En esa época, ya nos dimos cuenta de que nos unía el mismo espíritu emprendedor. Nuestro primer proyecto lo desarrollamos en segundo de carrera cuando comenzamos a diseñar y a vender sudaderas universitarias.
Al graduarnos nos fuimos a Valencia y creamos Jeff, en aquel momento Mr Jeff. Desde que comenzamos quisimos ofrecer algo que de verdad aportara valor real y facilitara la vida a la gente. Empezamos con la lavandería, pero ya teníamos en mente el objetivo de ofrecer más servicios.
[hde_quote author=»Eloi Gómez» position=»ceo de Jeff»] En los inicios tuvimos que centrarnos en una única industria, conocerla bien, adquirir el ‘know-how’ y la operativa para, una vez consolidada, poder dar el salto a nuevos sectores [/hde_quote]
¿Qué distingue a su app en un sector que estaba tan poco desarrollado tecnológicamente?
A través de la tecnología hemos conseguido digitalizar negocios tradicionales y ahora podríamos decir que somos expertos en esto. Lo hicimos con las lavanderías y después han venido centros de fitness, salones de belleza y centros de masajes.
Volviendo a la lavandería, en Mr Jeff ofrecemos la mayor conveniencia para el usuario. A través de la app, indica la hora y lugar de recogida de su ropa, que puede ser en su casa, el trabajo o donde desee, y en 48 horas se la entregan de vuelta limpia. Si el usuario prefiere llevarla a la tienda física a pie de calle porque le cae de camino al trabajo, también puede hacerlo. La omnicanalidad nos permite abarcar más públicos, y el sistema de franquicias nos permite controlar la calidad en los procesos.
¿Por qué la apuesta tan fuerte por el modelo de franquicias y la compra de lavanderías (y ahora gimnasios y peluquerías) locales?
Pensamos que la franquicia es la fórmula perfecta. Este modelo permite que cada local se adueñe de un territorio pequeño a su alrededor y controlar la logística y la calidad porque los procesos están preparados para que el franquiciado pueda asumir un máximo de carga o de trabajo diario.
Nuestro primer modelo ponía en contacto lavanderías con clientes que nosotros les conseguíamos. En una segunda fase, además, les organizábamos la logística, pero esto hizo que las pequeñas lavanderías no pudieran asumir la demanda. Entonces se comenzó a pensar en un modelo de grandes fábricas, pero esto tenía un problema logístico para ciudades grandes con un mercado importante para nosotros como la Ciudad de México o Sao Paulo: era muy difícil poder llegar a tiempo y dar un buen servicio desde un punto de la ciudad hasta las afueras donde están las fábricas. Descubrimos que la mejor forma de hacerlo era tener un modelo de pequeñas fábricas, y así llegamos al modelo de franquicia.
[hde_quote author=»Eloi Gómez» position=»ceo de Jeff»] Con el modelo de franquicias, nos aseguramos de que la calidad y la experiencia del usuario sea excelente y consistente en todas partes del mundo, respondiendo a una misma marca [/hde_quote]
Su presencia global en más de 40 países confirma que las necesidades de los usuarios son las mismas. ¿O existe cierta disparidad entre lo que esperan y demandan franquiciados y clientes de un país u otro?
Sí que se observan diferencias entre regiones y países. Por ejemplo, hemos observado que en Latam se demanda más la bolsa de lavandería, mientras que en España la tintorería también tiene mucha fuerza, y en Tailandia lo más demandado es el servicio de planchado.
Nosotros nos basamos mucho en el uso de los datos, ya que nos dan información sobre lo que quiere el cliente, cuándo y cómo, y todo esto en cuatro continentes diferentes. Con tantas franquicias y clientes en el mundo, intentamos fijarnos mucho en los datos de comportamiento para cada vez entender mejor qué quiere el usuario y poder ofrecérselo.
¿Por qué funciona tan bien en Latinoamérica?
Los usuarios están más acostumbrados al servicio de lavandería, mientras que en España no es tan común. En Latinoamérica, la densidad de puntos Jeff es más importante que en otras regiones, lo que nos da un mayor reconocimiento de marca. Por otro lado, podríamos decir también que es nuestro mercado más fuerte porque apostamos por él desde nuestros inicios. Aunque Asia, un mercado con infinito potencial, representará uno de nuestros principales motores de crecimiento en el futuro.
¿Su modelo es exportable a otros sectores?
Sí, en octubre de 2019 decidimos lanzarnos al mercado del fitness y de la belleza, con Fit Jeff y Beauty Jeff, respectivamente, y hace unos meses al del wellness con Relax Jeff, algo que no tiene nada que ver con nuestros inicios en lavandería. Pensamos que casi cualquier negocio se puede digitalizar.
Cualquier negocio que cumpla con ciertas características y que ayude a mejorar el día a día de las personas es factible de estar bajo el paraguas de Jeff. Además de esto, hay que tener en cuenta que Jeff pone a disposición de los emprendedores que quieren empezar un negocio todas las herramientas para que puedan hacerlo con éxito y, esto incluye a gente que todavía no tiene una idea clara sobre qué negocio emprender, pero que de entre todas las opciones que ofrece Jeff, puede escoger una.
No han sido inmunes a la COVID-19. ¿Ha cambiado la pandemia su hoja de ruta para lo que resta de año?
Estos meses nos han servido para tener tiempo y poder pararnos a pensar más las cosas, repensar los planes y estrategias que se estaban ejecutando. En el día a día vamos muy rápido y este parón obligatorio nos ha servido para replantearnos todo lo que antes era más difícil de analizar y para mejorar en muchas cosas, porque siempre se puede mejorar.
La prioridad de Jeff ha sido ofrecer toda la ayuda posible a los franquiciados. Decidimos cancelar el pago de royalties durante cuatro meses, desde marzo hasta junio, y después hemos decidido implantar tres meses más de carencia progresiva de los mismos. Comenzando por el 25% en julio, el 50% en agosto, el 75% en septiembre, llegando al 100% en octubre. Esto ha repercutido directamente en la empresa, pero nos parecía lo justo. Nuestros franquiciados confían en nosotros y tenemos que corresponderles, especialmente en los momentos difíciles.
[hde_quote author=»Eloi Gómez» position=»ceo de Jeff»] La pandemia nos ha hecho evolucionar a una política de flexibilidad total, en la cual nuestros empleados pueden disponer de instalaciones presenciales o realizar su trabajo diario en remoto [/hde_quote]
Una curiosidad: ¿por qué el nombre de Jeff?
Cuando creamos la empresa en 2015, únicamente con la línea de lavandería a domicilio, se llamaba Mr Jeff, y este nombre lo decidimos por Geoffrey, el mayordomo de la serie televisiva ‘El príncipe de Bel Air’, un personaje icónico de los 90, con el que buscábamos evocar «el concepto de mayordomo con clase».
Cuando hicimos el rebranding de la marca en octubre de 2019, no quisimos desvincularnos totalmente de la notoriedad que habíamos conseguido con Mr Jeff en el mercado, por esto se optó porque cada nueva línea de negocio incorporase la palabra Jeff, de manera que las nuevas líneas de negocio que se abrieran fueran fácilmente identificables con nuestra marca: Beauty Jeff, Fit Jeff o Relax Jeff.
Imágenes | Cedidas por Jeff