Corría el año 1971 cuando se mandó el primer correo electrónico. Unos años más tarde, aún en la prehistoria de Internet, se lanzaban las primeras campañas de email marketing. Hoy, sitiada por las redes sociales y amenazada por el big data y la inteligencia artificial, esta técnica está más viva que nunca. Tiene mucho futuro y te explicamos por qué.
El email es el rey
No lo decimos nosotros. Así titula la compañía de análisis de mercado eMarketer uno de sus últimos informes. Nueve de cada 10 expertos en marketing confían en las campañas de email y, en determinadas industrias (como la farmacéutica y la de los viajes), la fe en el correo electrónico es total.
De acuerdo con los datos de Radicati Group, recogidos en el informe, en la actualidad, se mandan 269.000 millones de emails al día. Cada 24 horas. Además, las previsiones señalan que este número seguirá creciendo y que en 2021 se mandarán casi 320.000 millones al día.
“Es cierto que existe una preocupación acerca de si las nuevas plataformas de mensajes canibalizarán la audiencia del email o no, pero, en general, las generaciones más jóvenes todavía son fieles al correo electrónico. Aun así, es probable que los usuarios demanden cada vez más servicios personalizados”, señala Jillian Ryan, analista de eMarketer.
Las fortalezas del email marketing
Con 40 años a sus espaldas, el email marketing es una técnica que ha sido analizada a conciencia. El informe Email Marketing Industry Census, elaborado por Econsultancy y Adestra, es uno de los análisis más respetados del sector. En su edición de 2017, tras preguntar a más de 1.200 expertos en marketing, señala las claves de por qué el email sigue triunfando como herramienta de marketing.
- La efectividad. Al ser una técnica consolidada, las campañas de marketing por correo electrónico cumplen, si están bien hechas, sus objetivos. Además, el retorno de la inversión (o ROI, por sus siglas en inglés) es todavía satisfactorio y muy medible.
- La importancia en la compañía. Si algo funciona, por qué cambiarlo. En muchas compañías, las campañas de email generan buena parte de las ventas y siguen mostrándose efectivas.
- La optimización y la personalización. Con la irrupción de los dispositivos móviles, el email sufrió para adaptarse. Sin embargo, su flexibilidad como formato y su capacidad de optimización y personalización le han asegurado una cuota importante de protagonismo en smartphones y tablets.
- La automatización. Gracias a su completa integración en los sistemas de CRM (customer relationship management) y a la gran cantidad de herramientas disponibles en el mercado, las campañas de email disfrutan de un alto nivel de automatización que facilita la vida a los departamentos de marketing.
¿Cómo pinta el futuro?
Las predicciones de futuro para el email marketing abundan en la red. Sin embargo, todas coinciden en que, en los próximos años, el correo electrónico se aliará con el big data y la inteligencia artificial, ganará en automatización e interactividad y, también, en seguridad.
- Más y más interactividad. “Los clientes podrán hacer compras dentro de la campaña de marketing sin necesidad de abandonar el email. Las campañas se parecerán más a la experiencia dentro de una app, con vídeos y otros elementos integrados”, explica Tom Klein, vicepresidente de marketing de Mail Chimp. Para lograr la perfecta integración de estas herramientas, el soporte de HTML5 será fundamental.
- Vivan los datos. El big data está revolucionando el marketing y el email no podía ser menos. Según la compañía de software de marketing Litmus, durante los próximos cinco años, las técnicas de análisis de datos ganarán peso a la hora de planificar una campaña de correo electrónico, personalizarla y automatizarla. También se ganará en engagement y se descifrará con gran precisión el comportamiento de cada usuario y el rendimiento de la campaña.
- Segmentación y automatización. Como consecuencia directa del análisis de big data, los equipos de marketing tendrán acceso a una mayor segmentación de audiencias. Además, gracias a la irrupción de la inteligencia artificial y de la mano de los chat bots, las campañas funcionarán de forma más y más automática.
“Sin lugar a duda, el email sigue generando un beneficio”, concluye el informe de eMarketer con el que arrancamos este artículo. Así, sin dejar de lado los nuevos formatos y adaptándose a las nuevas herramientas, el correo electrónico seguirá teniendo un lugar prominente en las campañas de marketing mientras siga siendo efectivo. Y, por el momento, parece que esto no va cambiar.
Juan F. Samaniego
Imágenes: eMarketer, iStock