¿Recuerdas cuando comprabas discos de música? Piensa en cómo era aquella industria: comprabas los discos que escuchabas en las emisoras, seguías a grupos que leías en las revistas, desgastabas el disco una y otra vez y volvías a comprarlo, durante el camino a la tienda en la radio te presentaban nuevos grupos que a su vez se repetían en los escasos canales de tv música que existían así que los comprabas al llegar a la tienda, etc…
Todo estaba preparado para que formases parte del proceso, una maquinaria controlada para que gastases tus ahorros en los grupos más escuchados y elegidos por la industria, porque efectivamente no había más opciones que las que la industria musical marcaba. O por lo menos esto es lo que piensa Seth Godin, un súpergurú del marketing, reconocido mundialmente y que nos habla de las posibilidades infinitas que nos brinda la “era de la conexión” en la que nos encontramos y cómo está afectando a los mercados más tradicionales. Nosotros, siguiendo la estela de este gurú, pensamos que los jóvenes emprendedores tienen mucho que aportar aquí, o mejor dicho, muchas oportunidades que aprovechar siguiendo su filosofía empresarial.
Nuevas reglas de juego
Según Godin, la inmediatez de las conexiones y la capacidad para comprar y escuchar música de cualquier tipo, en cualquier lugar y en cualquier momento no acabó con la música como tal, pero sí con la industria musical del momento. Y si tú, emprendedor con ganas de éxito, pretendes aplicar las mismas reglas del pasado estás destinado al fracaso, porque no solo los medios de producción han cambiado sino que la diversidad del público y sus necesidades concretas ahora son más visibles que nunca.
Dirigirse a las grandes masas ya no te garantiza buenos resultados, Internet nos presenta diferentes usuarios, potenciales clientes de productos que antes ni existían. Ya no existe la “gente común”, y esta nueva gente “rara” no va a querer escucharte por los canales más tradicionales sino por otros medios más afines a su condición de “diferentes”.
Pero además estos nuevos usuarios, con los que tienes que conectar, demandan comprar productos, demandan que les ofrezcas cosas nuevas y demandan compulsivamente que seas capaz de satisfacer sus particulares necesidades.
Los medios de producción son los mismos para todos, tu conexión a Internet no es tan diferente de la de Jimmy Whales ni la de ningún economista de Stanford, pero lo que te diferencia como emprendedor no son los medios sino la idea, la inspiración para crear un producto dirigido a un determinado nicho. Godin dice que la gente común es aburrida y que los productos diseñados para ellos también lo son. En cambio la creatividad y la innovación es divertida e inspiracional, y este es el nicho a cubrir por los jóvenes emprendedores del momento. ¿Te apuntas?